Las vacaciones son uno de los mejores momentos para que los niños acudan al dentista para una revisión bucodental. Pero también los mayores deben aprovechar el fin del verano para comprobar la salud de la boca tras un periodo en el que son habituales los excesos.
Ya sabéis que me gusta insistir en la prevención: es lo más importante para evitar problemas en el futuro en la salud de tu boca y, sobre todo, nos ahorrará disgustos y dinero. El dentista no es caro si hay prevención y tenéis que tener en cuenta algunos factores propios del verano:
–Elevadas temperaturas.
-Una menor salivación bucal.
-Descuido de los hábitos de higiene dental (especialmente si nos encontramos fuera del lugar habitual de residencia).
-Una alimentación más permisiva con productos más agresivos con los dientes, favorecen la aparición de infecciones bucales, caries o patologías como la gingivitis, a la orden del día en las clínicas dentales tras el verano.Continue Reading
