Aunque cuando gozamos de nuestra plenitud dental quizá no somos conscientes, es cuando sufrimos la ausencia de alguna pieza dental -bien porque somos niños y se nos caen o bien porque somos mayores y los perdemos de una forma u otra- cuando nos damos cuenta de que los dientes sí afectan en la pronunciación de las palabras.
Otros órganos y partes del cuerpo como la faringe o garganta, la lengua o los labios también cumplen una función fundamental en este sentido. El papel de los dientes, en su caso, es el de modular la cantidad de aire que sale de la boca, articulando palabras y frases. De faltar alguno de ellos o verse modificado su tamaño o apariencia –debido a prótesis, ortodoncias, implantes…-, nuestra pronunciación se verá afectada también.
La ausencia o pérdida de piezas dentales provoca cambios en nuestra pronunciación. No nos impide comunicarnos, pero es evidente que hay letras o conjuntos de ellas cuya pronunciación nos resulta más complicada o, directamente, ni siquiera se parece a lo que nos gustaría decir. La ‘r’ suele ser una de las más complicadas, junto con su unión con la ‘d’ (‘dr’), aunque hay otros muchos casos.
La ausencia, y también la presencia ‘extraña’
Pero, ojo, no sólo la ausencia de dientes puede modificar nuestra pronunciación: la colocación de prótesis dentales, implantes o fundas, así como, por supuesto, ortodoncias, si no se realiza de la forma correcta, también puede perjudicar a nuestra forma de hablar, causándonos problemas y evidenciando que nuestros dientes ya no son exactamente iguales a como venían siendo.
De hecho, muchos de los profesionales que viven de su voz, y nos referimos, claro está, a los cantantes, son muy reacios a llevar a cabo cualquier tipo de tratamiento sobre sus dientes, ya que son conscientes de que cualquier mínimo cambio en su estructura o fisionomía puede derivar en una variación de su tono de voz o su pronunciación, perdiendo de ese modo sus características especiales. Una funda en una pieza dental, un aparato de ortodoncia o un implante que no fuera exactamente igual que su diente anterior podrían hacer peligrar su carrera.
De aquí que el cuidado de nuestros dientes sea tan importante para nuestro habla. Y de aquí también la importancia de recurrir siempre a su profesional de confianza, a su odontólogo. Se trata de una razón de peso más para mantener nuestra salud bucodental a raya, y, desde Caredent Leganés estaremos encantados de ayudarte cuando sufras las consecuencias de una pérdida dental, para que tu pronunciación y tus dotes comunicativas se vean lo menos afectadas posible.